Definición de salud mental
Para gestionar la salud mental debemos saber primero su significado. Esta se refiere al bienestar mental, psicológico y emocional. Esta incluye nuestra capacidad para enfrentarnos a las diferentes situaciones que nos presenta la vida y nuestras habilidades para superar los retos a los que somos sometidos.
Tener una buena salud mental implica tener claro que nosotros somos los únicos responsables de nuestras vidas. Depende de cada uno la manera en que haya decidido vivir el tiempo que le fue prestado. También somos los únicos responsables de la manera en que gestionamos nuestras emociones.
Mantenernos saludables mentalmente no es algo que se pueda lograr con facilidad. Sobre todo, cuando la convivencia se hace tan difícil en medio de un mundo cada vez más complicado.
El origen de la salud mental
La salud mental debe comenzar por la obtención de una buena autoestima. Dicho esto, debo decirles también que la autoestima se desarrolla en la niñez, por lo que la salud mental tiene su origen en la infancia de cada individuo. Por lo tanto, tener una infancia segura, en un entorno saludable lleno de amor, felicidad y respeto puede brindar una buena salud mental.
Sin embargo, el hecho de que una persona haya sido feliz durante su infancia no va a garantizar que sea una persona mentalmente estable por toda su vida. La salud mental se debe mantener a través del tiempo, a medida que vamos acumulando vivencias en nuestra memoria.
Aunque la manera en que nos hayamos criados es la base de nuestra salud mental, la experiencia de lo que hemos vivido en nuestra vida adulta será un gran aporte. Por lo que esta no tiene una edad en particular para comenzar a fallar.
Importancia de gestionar nuestra salud mental
La salud mental es sumamente importante para la convivencia de los seres humanos, desde su nacimiento hasta la hora de su muerte. Esto es debido a que según esta, se definirá la manera en que nos enfrentamos al mundo y la forma en que gestionamos nuestras relaciones sociales. También la salud mental es de suma importancia para el desarrollo de nuestro crecimiento personal.
También va a depender de esta la forma en que nos vemos a nosotros mismos y la manera en que decidamos administrar nuestras capacidades. El desarrollo de nuestra autoestima y la manera en que nos presentemos ante las personas que nos rodean, también será producto de nuestra estabilidad mental. Además, el desarrollo del amor propio de cada individuo es consecuencia de dicha estabilidad.
Técnicas para gestionar la salud mental
Como dije antes, mantener la salud mental no es algo que podamos lograr tan fácil. En medio del mundo en el que estamos viviendo el día de hoy es muy difícil encontrar la paz. Sin embargo, hay cosas que podemos hacer para gestionar nuestra salud mental y mantenerla estable.
- Ser positivo. Esto es algo que nos va a ayudar a soportar los tropiezos. Si aprendemos a ver el lado positivo de las situaciones a las que tenemos que enfrentarnos, podremos hallar la calma en medio de la tormenta. A medida que pensamos las cosas con serenidad hay mas posibilidad de encontrarle soluciones. De esta manera ver el lado positivo de las cosas nos ayudará a encontrar soluciones y por ende a mantener nuestra estabilidad mental.
- Mantener una vida social. Las personas tenemos la necesidad de comunicarnos y ser escuchadas. Por ende, es muy importante mantener relaciones sociales fuertes y estables. Saber que tenemos personas a nuestro alrededor en quien podemos confiar nos da seguridad y esta su vez nos ayuda a mantenernos estabilizados. Además, sentirnos aceptados como parte de un grupo nos ayuda a superar la ansiedad social. También mantener una vida social estable nos ayuda a relajarnos y a liberar estrés.
- Tomar tiempo para relajarse. Un momento de tranquilidad y relajación ayudará a alejar las preocupaciones. Es muy importante que pongamos en nuestra agenda ese momento que nos servirá para liberar el estrés del día a día, este debe ser una prioridad. Tomar un momento para estar en paz servirá para reiniciarnos, calmarnos y dejar la prisa. Pensar las cosas con tranquilidad nos ayudará a encontrar la paz.
- Dormir bien. La falta de sueño puede provocar irritabilidad y cansancio, por lo que las personas que no duermen bien, a menudo se encuentran de mal humor. También la falta de sueño suele generar estrés y causar ansiedad por lo que afecta directamente nuestra salud mental. Además, no dormir lo suficiente afecta en gran medida nuestro estado de ánimo. De este modo es posible que podamos provocar conflictos que a su vez nos generan más estrés, que provoca inestabilidad mental. Al contrario, si dormimos bien podremos estar mas relajados y tranquilos, por lo que será más fácil enfrentarnos a los afanes del día.
- Establecer disciplina. Una vida organizada es mucho más fácil de sobrellevar. Mantener una disciplina en nuestro diario vivir genera paz mental. Organizar nuestras prioridades y trabajar en ellas con disciplina nos ayudará a obtener mejores resultados. Por lo tanto, la disciplina será una buena aliada nuestra en lo que concierne a la búsqueda de la paz mental.
- Trabajar en el desarrollo personal. Trabajar en aumentar nuestros logros personales ayudará a mantenernos mas felices y realizados. No hay nada que colabore más con la salud mental que la felicidad, esta nos ayuda a encontrar la paz y a mantenernos positivos en los peores tiempos. Por lo tanto, nuestro desarrollo personal es un tema relevante en lo concerniente a la salud mental.
- Someterse a los valores. Lo que define a las personas como buenos o malos son los valores por los que esta se rija. Una persona respetuosa, agradecida y disciplinada será menos señalada por los demás, lo que ayudará a mantener las relaciones sociales. Además, como diría en buen dominicano, estas personas no tienen cola que le pisen. Por lo tanto, una persona con valores será respetada, aceptada y valorada, esto ayudará en la manutención de su equilibrio mental.
- Hacer ejercicio. Mantener el cuerpo físicamente activo reducirá el estrés y mejorará el estado de ánimo, reduciendo así el riesgo de sufrir depresión. De esta manera hacer ejercicio se convierte en un pilar para mantenernos mentalmente estables.
- Fomentar la autoestima. Aceptar nuestro yo, nuestro ser interior con todo lo que lo forma (lo bueno y lo malo) es la mejor técnica para mantener la salud mental. Saber que no somos perfectos y que esto no nos hace indignos activará el autoconcepto, el autorrespeto y la autovaloración. Además, tener una buena autoestima es motivación al crecimiento personal que a su vez nos ayuda a alcanzar las metas antes planteadas. Por lo tanto, tener una buena autoestima nos ayudará a sentirnos satisfechos con nuestra vida lo que garantiza la salud mental.
Y tú ¿cuáles tecnicas utilizas para mantener tu mente saludable?